Minga Indígena llegó a Bogotá para buscar un diálogo con el presidente Duque

Después de recorrer 600 kilómetros en vehículos tipo ‘Chivas’, con bastones, banderas, cantos, cultivos y una cantidad de personas que salieron a recibirlos con aplausos y pitidos (como si fuera la llegada de la selección Colombia de Futbol después de una copa mundial), arribó a Bogotá la Minga Indígena de aproximadamente ocho mil personas, pertenecientes a las comunidades Misak, Nasa, Totoró, Yanacona, Coconuco, Inga, entre otros.
Desde el pasado 12 de octubre, la minga inició su desplazamiento desde el municipio de Caloto (Cauca), hasta llegar a la ciudad de Cali (Valle del Cauca), donde los líderes expresaron su petición de diálogo al presidente de la república Iván Duque, donde exigían:
- Los pueblos indígenas piden que sean acompañados por el Estado, ya que su negligencia ha implicado que estas comunidades estén en medio de conflictos entre grupos armados, afectando a sus comunidades y territorios.
- Los sistemáticos asesinatos de líderes sociales en el país, principalmente en el departamento del Cauca.
- El establecimiento de un debate con los diferentes actores del Gobierno Nacional
- Intervención de la Nación en las diferentes políticas donde las economías ilícitas se imponen a las lícitas.
Sin embargo, el presidente nunca quiso dirigirse a la capital vallecaucana, y solo envió a una delegación encabezada por la ministra del Interior, Alicia Arango. Ante la negativa del mandatario, los líderes de la minga decidieron establecer una hoja de ruta para llegar a la capital de la república, donde pretenden encontrar a Duque para que acceda a una conversación con los indígenas y poder llegar a un acuerdo con estas poblaciones.
En Calarcá (Quindío), Cajamarca e Ibagué (Tolima), Fusagasugá y Soacha (Cundinamarca), recibieron apoyo y repudio por parte de los ciudadanos. Mientras que unos afirmaban su compromiso con la lucha del grupo nativo caucano, otros aseguraban que tenían infiltración de grupos armados ilegales, así como un posible contagio de coronavirus, poniendo en riesgo la seguridad de estos municipios. No obstante, fueron más los aplausos y arengas a favor que en contra, hecho que impulsó a la minga a continuar su recorrido hasta llegar al Palacio de los Deportes en Bogotá, lugar que estableció la alcaldesa Claudia López y las secretarias de Gobierno, Seguridad y Salud para el alojamiento de las ocho mil personas.
En este sitio, fueron adecuados carpas, baños, lavamanos y elementos de primera necesidad, así como varios equipos que garanticen el cumplimiento del protocolo de bioseguridad para la prevención del Covid-19. Justamente, la mandataria distrital inspeccionó el lugar, donde una avanzada de la minga la recibió con mantras, rezos a la madre naturaleza, riegos y sahumerios con plantas traídas de la región y dio un discurso cuestionando nuevamente al Gobierno de Iván Duque. “La Alcaldía respeta la movilización social, no la estigmatiza y la acompañará en sus recorridos con gestores de convivencia, que junto a la guardia indígena, son garantías de movilización pacífica. La Minga va a recorrer la ciudad de manera pacífica, como lo ha hecho en su recorrido desde que salió del Cauca”, dijo Claudia López.
Por su parte, la ministra del interior Alicia Arango aseguró que están dispuestos a conversar con las comunidades, pero que durante el actual Gobierno han realizado acuerdos y avances con estos pueblos. “Tendremos la necesidad de establecer una ruta metodológica para atender las inquietudes de la minga indígena y dividir los temas por áreas del sector público o del Estado, según la competencia”, afirmó Arango.
Otras voces se unieron para que se concrete este diálogo como la Conferencia Episcopal quien hizo un llamado a todos los colombianos para crear “una verdadera cultura del encuentro fraterno que nos permita abrirnos a los hermanos, descubrir la riqueza de la diversidad, sanar heridas, tender puentes y abrir caminos para la convivencia en la justicia y el bien común”, aseguró la Conferencia en un comunicado.
Por el momento, se espera que la población indígena realice una marcha pacífica hasta la Plaza de Bolívar donde harán un llamado a la presidencia para que escuche sus peticiones y no los ignoren más. También, se dará un encuentro entre los líderes de la Minga con el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo, donde abordaran las temáticas para llegar a una solución que beneficie a estos territorios.